Cuerpos entre sombras

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En lo alto de la noche, una luna de plata vestida con vuelos de nubes color cenizo y adornado de estrellas, nos vigila. El viento sacude las cortinas y las preña de aire en un incesante movimiento.
Continuamos refugiados como niños en una cueva de sábanas, entre caricias, desvelados por nuestra pasión.
Las sombras gobiernan la habitación, y el calor lame nuestros cuerpos en llamas.
Entre sombras y sudor, describiendo en un instante el amor que ambos nos profesamos, nos dejamos llevar hacia la capa más delgada del placer. De mí se derrama una palabra, escabulléndose hasta tus oídos.
Te refugias en mis brazos, dejando descansar tus ojos y tu corazón en el fluir de todos los sentimientos. Abrazos. Sonrisas. Una delgada gota de sudor se derrama por tus muslos. Deslizo mis dedos por tu espalda, las enredo en tu cabello, hasta dejarme caer en una inmensa sensación de resplandor.

Estoy deseoso de amarte hasta el amanecer… hasta que nuestros cuerpos queden desprotegidos por el alba, y se vean atemorizadas las sombras por el brillo de otro día, para nuevamente volver a formar el puente perfecto con nuestros cuerpos.

3 comentarios:

  1. Para aprendérselo y recitarselo a la persona amada.

    Un abrazo Ricardo.

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  2. Muchas gracias, Rafa. Es un placer tenerte por acá.

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  3. te amo. mi hermoso bb. querido

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